Sin apenas descanso, el español ponía rumbo a Estados Unidos para disputar los dos primeros Masters 1000 del año: Indian Wells y Miami. 3-1 la manga decisiva, en una final de suspenso con múltiples puntos espectaculares (35 golpes ganadores por 28 errores no forzados para el español). Sin embargo, en rueda de prensa, señala que llegar a la final en Melbourne es muy positivo para él y el resto de su temporada, después de dos temporadas arruinadas por las lesiones.